lunes, 1 de junio de 2015

Gracias a semillas mejoradas se duplicó la producción de maíz



Después de un año de liberar dos nuevas variedades de semilla de maíz hibrido, en Tarija ya se tiene los primeros resultados. Pues en la actualidad éstas permitieron más que duplicar la producción.

Esto facilitará cubrir, en parte, la demanda departamental y nacional.
En Tarija el rendimiento de maíz era de tres toneladas por hectárea, pero con las nuevas variedades se obtiene 7,2. Los principales productores están en el Chaco y O´Connor.
Las dos semillas que permitieron este logro fueron liberadas por el Instituto Nacional Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (Iniaf), y adquirieron el nombre de esta institución más H1 y la otra HQ2.
De acuerdo al año agrícola 2014-2015, en Bolivia el cultivo de maíz en grano es de una superficie de 48.000 hectáreas, con una producción de 1.037.226 toneladas. Tarija tiene una superficie de 38.678 hectáreas de cultivo con rendimiento de 90.128 toneladas.
Pues, el maíz significa 17.146,71 bolivianos en lo que refiere a ingresos bruto por venta de semilla certificada y 2.033,29 bolivianos por ingresos bruto por venta de producción comercial.
Según el Iniaf, la disponibilidad de semilla certificada para garantizar la siembra es de más de 3.500 hectáreas en la gestión 2015/2016 en el departamento y el país.
Para el director de este ente en Tarija, Luis Acosta, el desafió todavía es poder aumentar la producción de la que ya se obtuvo, para lo cual todavía trabajan en ese aspecto.
De acuerdo a las centrales de campesinos, de las dos zonas productoras del departamento, más de 50 mil hectáreas son utilizadas para la producción de maíz. Por el momento esperan la cosecha que empieza en junio y se extiende hasta el siguiente mes.
Según el ejecutivo de la Central de Campesinos de Yacuiba, Tomás Ramos, la constantes lluvias en ese lugar impide que empiecen con la actividad, esperan que eso no les ocasione pérdidas, porque el maíz se puede pudrir.
Señaló que por hectárea ellos cosechan unos 120 quintales, pero en el caso de los que trabajan con híbridos llegan hasta 200.
Entre tanto, el Ejecutivo de la Central de Campesinos de O´Connor, Calixto Castro, señaló que cuentan con unas diez hectáreas para la producción, por lo tanto, eso es utilizado para el consumo local, para los animales, y otro tanto es enviado hacia la capital del departamento.
El precio que entregan en el lugar de producción fluctúa entre los 80 y 100 bolivianos el quintal.
Para Acosta también es importante la producción masiva de semillas, dentro de lo previsto está producir un volumen de unos 10 mil kilos de las dos variedades mejoradas, porque por hectárea se utiliza entre 25 y 30 kilos. Y se tiene que abastecer a todo el chaco boliviano principalmente.



Perdieron un 40 por ciento de la producción

Si bien con las dos nuevas variedades se pudo más que duplicar la producción de maíz, la constante amenaza de las plagas comprende un riesgo, y puede generar pérdidas significativas para los que viven de esa actividad.
Según el ejecutivo de la Central de Campesinos de O´Connor, Calixto Castro, en la última cosecha se perdió aproximadamente el 40 por ciento de la producción. Eso debido a las plagas y las constantes lluvias que ocasionaron que el maíz se pudriera en la planta.
El dirigente campesino indicó que los lugares más afectados fueron los de la zona alta de esa jurisdicción, y que en la actualidad todavía tienen maíz que pudieron cosechar pero que se encuentra mojado, ya que las condiciones climatológicas no son aptas para que el producto pueda secar.
Asimismo, explicó que las plagas son una constante amenaza para ellos, porque cada vez aparecen nuevas, para lo cual, primero se tiene que hacer un estudio y ver qué tipo de veneno utilizar para eliminarlas. Pero señaló que a diferencia de anteriores años se avanzó en ese aspecto. Mencionó que el gusano cogollero es uno de los más frecuentes, pero que lo pueden controlar.

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