En la comunidad de Chorcoya Avilés, en el municipio de Yunchará, Tarija, el 16 de mayo fue inaugurada la Planta Procesadora de Haba, un esfuerzo conjunto entre el Gobierno Municipal de Yunchará, la Unión Europea, el Programa Mundial de Alimentos (PMA), del Instituto de Investigación y Capacitación Campesina (IICA) y la Asociación de Productores de Haba del municipio.
Se trata de un emprendimiento que viene desde el 2008, cuando por entonces era alcalde de Yunchará el actual gobernador de Tarija, Lino Condori. Para la alcaldesa de Yunchará, Gladys Alarcón, el mayor reto actualmente es que la nueva planta de harina de haba tenga la suficiente provisión de materia prima, a fin de que esté en constante actividad.
Conscientes de que la producción de haba de Yunchará es insuficiente (10 toneladas al año), lo que se prevé son alianzas estratégicas con municipios vecinos, como El Puente, cuyos cultivos de haba son abundantes, señala la alcaldesa.
Cadena. Al final, se apunta hacia la Cadena Productiva del Haba. En primer lugar para la provisión sostenida del desayuno y almuerzo escolar de las 32 unidades educativas que hay en Yunchará y, eventualmente, para otros municipios.
Con la producción básica de harina de haba, lo que se proyecta generar en lo inmediato es harina achocolatada, harina láctea, afrutada; asimismo, cascarilla de haba, haba sin cáscara, y las habas de primera (grande), segunda (mediana) y tercera calidad, la más pequeña.
Como se trata de diversificar el alimento para los estudiantes, a la fecha, la planta procesadora de haba se sumará a otros dos proyectos existentes en la región, como son la provisión de api (de un municipio aledaño), y la entrega periódica de carne de camélidos por parte de las asociaciones productoras del lugar.
Escuela. Lo mismo que en otras escuelas, en Chorcoya Avilés también se cuenta con un huerto escolar, con cuyos productos (repollo, acelga, espinaca y lechuga) también se complementa la dieta de los escolares, destaca el director de la escuela, Franklin Gutiérrez.
El profesor Gutiérrez cuenta que se sirve desayuno y almuerzo porque las actividades escolares se extienden hasta las dos y media de la tarde.
Algunas veces, cuando los alimentos empiezan a faltar, se pide una contribución a los padres de familia, que por lo general consiste en 7 bolivianos o eventualmente un kilo de carne. Para el profesor Gutiérrez, que trabaja 16 años en la escuela, hay un evidente cambio entre los alumnos desde que hay desayuno y almuerzo escolar: son más activos y despiertos.
Productores de haba
En Chorcoya Avilés existe una Asociación de Productores de Haba, 172 socios en total, que tienen un capital de operaciones de 37 mil bolivianos, préstamo otorgado por la institución IICA.
Ir contra la migración
La nueva Planta Procesadora de Haba de Chorcoya Avilés también es vista como una forma de luchar contra la migración típica del lugar.
Yunchará (municipio del que es parte Chorcoya Avilés) tiene una población estimada de 6.074 habitantes; presenta una densidad poblacional de 3,38 habitantes por kilómetro cuadrado; y su tasa de crecimiento es negativa, -0,102% anual, según nota de prensa del PMA.
La escuela de Chorcoya Avilés, explica su director, Franklin Gutiérrez, tiene capacidad para al menos 150 estudiantes, pero hoy, por la partida de muchas familias, alberga a sólo 66. Y es que la tierra no da para mucho, cuenta, con inviernos de hasta 18 grados bajo cero, hay muy poca actividad agrícola, siendo la ganadería ovina el principal recurso.
Por esta razón, la nueva planta es una esperanza: será el mercado seguro de muchos productores que antes no podían vender su cosecha. Particularmente, se podrá aprovechar de la denominada “haba de tercera”, la más pequeña, que hasta ahora sirve sólo para consumo familiar.
Sumaj Sara para las escuelas
Sumaj Sara, buen maíz en quechua, es la asociación de productores y, se puede decir, procesadores del grano, que tienen en el desayuno y almuerzo escolar de Tupiza su principal mercado.
Sumaj Sara produce diversidad de preparados en base al maíz: api, tojorí, lagua, frangollo, horchata, galletas y saritas (empanadas de queso con albahaca). El gerente de Sumaj Sara, Policarpio Soruco, señala que el objetivo de hoy del emprendimiento, que empezó como una “agrupación” productiva, es convertirse en una S.R.L., Sociedad de Responsabilidad Limitada.
Sumaj Sara actualmente abastece la demanda de las escuelas de Tupiza. En el año 2009 vendió productos para el desayuno escolar por un valor de Bs 202.250, logrando incrementar sus ventas el 2010 hasta Bs. 722.616, destaca un reciente reporte del Programa Mundial de Alimentos, PMA.
La misma fuente apunta que con la diversificación de sus productos, Sumaj Sara consiguió ampliar su cobertura a mercados de desayuno escolar de los municipios de Atocha, Vitichi y Villazón, vendiendo hasta la fecha un total de 924.866 bolivianos.
Sumaj Sara se pudo instalar con el aporte de Bs 121.862 de parte de la Unión Europea (para equipos y maquinaria); Delap, con 138.517 para infraestructura, 50%; y el restante 50% aporte de la Asociación de Productores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario