La organización de ayuda humanitaria Oxfam destacó el miércoles el plan de Bolivia para otorgar a los campesinos un seguro agrícola y promover una revolución productiva para garantizar el abastecimiento de alimentos a sus habitantes.
“Creemos que medidas como el Seguro Agrícola o la Ley de la Revolución Productiva son iniciativas bien interesantes en las que el Gobierno de Bolivia debe insistir y abundar para que no sea únicamente una ley, sino una apuesta decidida en este sentido”, dijo el representante de la Oxfam en Bolivia, Luis Camacho.
Según esa organización británica, los precios de los alimentos básicos se duplicarán en 2030 debido al cambio climático y a la creciente escasez de recursos, por lo que instó a los gobiernos a tomar medidas urgentes para potenciar el agro.
En ese marco, el presidente Evo Morales remitió el miércoles a la Asamblea Legislativa el proyecto de la Ley de Revolución Productiva Comunitaria Agropecuaria, elaborado por indígenas y campesinos, para viabilizar la creación de un Seguro Agrario Universal de empresas de fertilizantes y semillas, y un observatorio agroambiental, entre otros beneficios para los productores.
Para el representante de la Oxfam, la inversión continuada y decidida en la pequeña agricultura campesina es la única vía para garantizar una mayor producción de alimentos.
“Nosotros creemos que los monocultivos y el desarrollo de la agroindustria destinada a la exportación ha demostrado fuertes problemas en otros países y Bolivia, como el resto de los países, debe preocuparse por ese enfoque que probablemente nos lleva a tener mayores problemas de seguridad alimentaria”, argumentó Camacho. (ABI)
CRISIS EN CIFRAS
Productores: más del 90 por ciento de las y los pequeños productores cultivan el 22 por ciento de la superficie, mientras el 2 por ciento de los productores comerciales ocupan el 56 por ciento. El 90 por ciento de los productores sobreviven con un promedio de una hectárea.
Pequeños generadores: los pequeños y medianos productores agropecuarios, pescadores artesanales y recolectores artesanales son quienes abastecen el mercado ecuatoriano de alimentos de la canasta básica y garantizan la diversidad productiva interna. De cada 10 hectáreas de maíz, arroz y papa, siete son cultivadas por familias agricultoras o pequeños productores.
Protestas: durante la última crisis de este tipo se vieron protestas públicas en 61 países, con revueltas violentas en 23 de ellos. En 2009, el número de gente hambrienta alcanzó un total de más de mil millones, por primera vez.
Dato: por cada dólar gastado en control de aguas, un país puede conseguir ocho dólares a cambio. (Fuente: Oxfam).
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