El ejecutivo de la Federación Departamental de Productores de algodón anunció su proyecto ambicioso

El presidente de la Federación Departamental de Productores de Algodón (Fedepa) contó sobre las épocas más oscuras que ha tenido el sector y devela sus proyectos con los algodones de colores.

¿Cómo fue el sector algodonero en sus momentos más mozos en Santa Cruz?
J.C.: Fue el cultivo extensivo que revolucionó la mecanización agrícola y en sus momentos buenos fue el fundador de la Cámara Agropecuaria, fundador de Findesa e inclusive el productor aportó 0.20 centavos de dólares por quintal para la adquisición de los campos que tiene la Universidad Gabriel René Moreno en El Vallecito. Adepa hizo muchas labores, entre ellas, consiguió la primera variedad de algodón boliviano, denominado 'mandiyuti'; luego llegaron las peores épocas, con las cuentas del banco agrícola, bloqueo del mercado internacional, el cual nos costó recuperarlo, subió la producción donde llegamos hasta 53.000 hectáreas. De ahí vinieron problemas del mercado externo, los precios internacionales bajaron.

Este año, gracias al esfuerzo de casi tres años conseguimos abrir una pequeña línea de crédito al pequeño y mediano productor, es así que entraron 17 productores con crédito. Ojalá, luego de cancelar los créditos que se deben todavía, volvamos a crecer en la campaña 2015-2016.

Posteriormente, con los problemas que tenía Adepa, decidimos cambiar la razón social Fedepa, en la que ya no están solo los empresarios y productores, sino las asociaciones productivas afiliadas a la Fedepa.

¿Con cuántas hectáreas empezaron?
J.C.: Como era una empresa privada, aparentemente empezaron con poco más de 500 hectáreas.

¿Cuándo fue el 'boom' del repunte del algodón en Santa Cruz?
J.C.: Con los créditos del banco agrícola. Si bien no todos eran productores, pero los créditos eran tentadores, hasta muchos políticos entraron, ahí fue donde no se pudo controlar la producción y declinó un poco y la comercialización falló por decisiones del gobierno, ya que después de haber vendido al mercado externo en un precio definido, el precio internacional falló y querían que se aumente. Ahí es donde fallamos.

¿En estos momentos el sector está buscando resurgir?
J.C.: Esa es la idea. Hoy hemos recibido solo 500 dólares por hectáreas, que es el costo del 70% del capital operativo, es decir, el productor asume el 30%. Con esto, para la próxima campaña los productores se van a animar a sembrar nuevamente.

¿Reciben o recibían apoyo del gobierno?
J.C.: No. Hace más de 25 años que no recibimos apoyo de ningún gobierno. El problema radica en que todos los gobiernos han tenido recursos para financiar al pequeño productor, pero por los requisitos que exige la banca, el pequeño productor no logra cumplirlos. En este caso, van a tener que ablandar un poco para ayudar al pequeño productor.

¿Qué otros incentivos necesita el sector?
J.C.: Mercado. Que la industria local nos compre el 100% de la materia prima.

¿Cuál será la razón por la que la industria no está comprando el algodón nacional?
J.C.: El justificativo de ellos puede ser porque nosotros no le garantizamos la materia prima suficiente que necesitan, pero eso se debe a que también no hay apoyo del gobierno.

¿Cuánto es la cantidad de algodón que requiere la industria?
J.C.: Aproximadamente nosotros debemos producir unas 20 mil hectáreas para cubrir la demanda de la industria nacional. Ahora, si sobra tendríamos que exportar, pero lamentablemente sembramos 1.800 a 3.500, nos compran muy poco. Hoy por hoy nos están comprando con algunas dificultades.

A comparación del algodón que traen del exterior, ¿el de Santa Cruz es competitivo en calidad?
J.C.: A excepción de Enatex, que se instaló para un algodón de fibra larga en su gran porcentaje, el resto de la industria utiliza nuestro algodón y exportamos sin ningún problema.

¿Actualmente existe algodón acopiado?
J.C.: Tenemos sin comercializar, estamos en tentativa con Agrofortaleza y también vender a otra industria; tenemos un pequeño paquete de lo financiado y queremos realizarlo para cubrir las obligaciones con el banco.

¿Qué proyectos tienen para el 2016?
J.C.: Tenemos un proyecto ambicioso, que viene como apoyo del gobierno brasileño para cinco países de América del Sur, se llama la Reactivación de Algodón en Bolivia, Paraguay, Argentina, Perú y Colombia. Esos recursos están canalizados vía gobierno y lo manejará la FAO; entonces nos apoyaría en la transferencia, tecnología e investigación. Ya nos ofrecieron traer material nuevo del Brasil e introduciremos cinco variedades nuevas de algodón de color.

¿Qué tipo de algodón se trata?
J.C.: Comercialmente hay algodones de color café y verde que están liberados y vienen otros tres colores que vamos a probar para liberarlo.

¿Cuántas hectáreas serán en este proyecto?
J.C.: Inicialmente no queremos arriesgar mucho, estamos queriendo traer 2.500 kilos para distribuir y enseñar a la gente a manejar el cultivo.

' Hace más de 25 años que no recibimos apoyo de ningún gobierno'