En los municipios de Alto Beni, donde existen 180 comunidades, más del 80% se encuentran afectadas y en otros casos incomunicadas por el deslizamiento de la plataforma en innumerables tramos camineros, además que ya se ha perdido más del 50% de las producción frutícola de las 3.300 hectáreas de plantaciones de banano que existen entre este municipio y en Palos Blancos, como informan autoridades de la Gobernación paceña.
Según el reporte del alcalde de Alto Beni, Joaquín Benito, se desconoce si la crecida del río La Paz y el terreno saturado por la persistente lluvia son las causas por las cuales grandes extensiones de terrenos han cedido provocando deslizamiento de plataformas en las rutas municipales, departamentales y de competencia nacional. “No sabemos si es sismo o terremoto pero es deslizamiento y es en todo el norte de La Paz”, declaró a tiempo de hacer el listado de las varias comunidades afectadas en su municipio.
“Se han movido lotes enteros, casas y todos han sufrido, (incluso) pérdidas hasta ocho hectáreas en un solo caso”, así también se perdieron varias viviendas que iban a ser entregadas dentro de un plan gubernamental. La comunidad de Kollasuyo es la más damnificada.
PRODUCCIÓN PERDIDA
“Es verdad, las 1.650 hectáreas están arrasadas, y va a tener su incidencia”, aseguró Mario Ticona, productor bananero, quien junto a Mario Ajno pidieron que las empresas que exportan su producción a Perú, Chile y en especial a los municipios paceños con los cuales se tiene contratos firmados sean benevolentes y entiendan la situación.
PEDIDO DE ATENCIÓN IGUALITARIA A LAS AUTORIDADES
Benito aseguró que se enviaron las notas respectivas anticipando estos hechos y describió la situación, “hay derrumbes a cada 50 metros, hay colapso y pérdida de alcantarillados en varios tramos. Entonces necesitamos la ayuda de las autoridades, como la unidad de Riesgos del Gobierno Departamental, también necesitamos el apoyo de Defensa Civil, pero al momento no lo estamos recibiendo”, afirmó Benito.
Desde su punto de vista, el Alcalde reiteró en varias oportunidades la atención preferencial que se está dando a otras regiones como el altiplano y el Tipnis en Cochabamba, “pero de Alto Beni ninguna autoridad se acuerda”, aseguró.
Las 200 familias afectadas no cuentan con energía eléctrica, no hay señal para llamadas desde celulares y el sistema de cañerías colapsó o quedó enterrado por los derrumbes y como se está repitiendo en otros lugares, la falta de agua potable agrava la situación pues los comunarios quedan expuestos a enfermedades virales.
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