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El documento contiene la descripción de productos nacionales e internacionales que controlan los males que afectan a la actividad agrícola, que pertenecen a las empresas socias de APIA, y que están registrados por el SENASAG. Se detallan las ventajas, forma de uso y las precauciones que se deben tomar, entre otros, en el uso de estos insumos que ayudan a mejorar los cultivos de frutas, cereales y hortalizas.
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A partir de hoy, los agricultores grandes, medianos y micros del país tienen a disposición una herramienta que les permitirá optimizar el rendimiento y la calidad de sus cosechas, sin descuidar el medio ambiente y la salud, garantizando el suministro permanente de alimentos y materias primas para la comunidad. Se trata de la cuarta edición de la Guía de Productos para la Protección de Cultivos, producida por la Asociación de Proveedores de Insumos Agropecuarios (APIA).
“El objetivo de lanzar esta publicación es que agricultores, profesionales del agro, técnicos, docentes y alumnos universitarios de agronomía de todo el país estén informados sobre los productos del sector y sus protocolos de aplicación”, explicó Marcelo Traverso, presidente de APIA.
La guía coadyuva a lograr un buen rendimiento de las cosechas, que se traduce en un suministro permanente de alimentos para la comunidad; un medio ambiente puro y limpio para las familias, vecinos y toda la población. Además ayuda a evitar la contaminación del medio ambiente en los campos, de las aguas de consumo humano, de los suelos que se siembran, y a evitar riesgos de intoxicación de los trabajadores.
Particularidades
El documento contiene información completa y detallada de más de 1.000 sustancias y productos, de industria nacional e internacional, que combaten plagas y organismos vivos –de origen vegetal o animal– que dañan los cultivos, como los ácaros (acaricidas), bacterias (bactericidas), hongos (funguicidas), insectos (insecticidas), moluscos (molusquicidas), nematodos (nematicidas), roedores (rodenticidas) y malezas (herbicidas). Además describe sus ventajas, su forma de uso y los cuidados que se debe tener.
Todos estos productos están registrados en el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (SENASAG) y pertenecen a las empresas socias de APIA.
“Estos productos están destinados a combatir, destruir, controlar, prevenir, atenuar o repeler la acción de los organismos y plagas, durante la producción, almacenamiento, transporte, distribución y elaboración de productos agrícolas y sus derivados”, sostuvo el ejecutivo de la Asociación.
Traverso Indicó que el empleo de estos productos contribuye a una producción agrícola estable y económica. No obstante –aclaró– que su utilización debe realizarse bajo ciertas normas de seguridad y respetando las precauciones aconsejadas en sus etiquetas.
Contenido
La guía incluye datos completos de productos agrícolas de países de Latinoamérica, Estados Unidos, Europa, África y Asia. Contiene información y orientación para la elección, compra, transporte y almacenamiento de productos destinados a la protección de cultivos (frutas, cereales, verduras y hortalizas); además de normas de seguridad, empleo de los equipos y de lectura de etiquetas.
Asimismo describe instrucciones que apuntan a la protección del aplicador de los productos, a posibles derrames, a la eliminación de residuos y envases, a la Norma del Triple Lavado y a la determinación de toxicidad; también abarca preceptos para el manejo, control integrado, reconocimiento, identificación y muestreo de plagas; y de primeros auxilios en casos de intoxicación ocasionada por el uso de los productos.
La cuarta edición de la Guía de Productos para la Protección de Cultivos contiene 420 páginas, incluye un CD con el mismo contenido, su costo es de Bs 350 y se la puede adquirir en las oficinas de APIA en Santa Cruz y La Paz. Traverso señaló que la periodicidad de este documento será bianual.
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