Con una producción que supera las 65 toneladas por temporada, el cultivo de manzanilla en Tarija se proyecta como la nueva alternativa productiva para varias familias campesinas. Es así que en el municipio de El Puente ya se instaló una planta procesadora de manzanilla para la elaboración de té y otros insumos.
La infraestructura está en proceso de equipamiento con maquinaria e insumos y beneficiará a productores de los municipios de Yunchará, El Puente, Cercado y Méndez, donde hay comunidades con potencial para la producción de manzanilla.
El presidente de la Asociación de Productores Agrícolas de la comunidad de Erquiz, Edwin Humacata, recordó que el cultivo de manzanilla en el lugar empezó por el año 1987 por un reducido grupo de comunarios, actualmente cerca de un centenar de familias se dedican al rubro y se extendió por La Victoria, La Choza y Erquiz Norte en el municipio de San Lorenzo y en algunas comunidades de El Puente y Cercado.
Según Humacata, el consumo de manzanilla en el departamento va en progresivo aumento, sobre todo en forma de infusión (mates) por las propiedades medicinales.
“La manzanilla es una planta medicinal que se usa durante el invierno para combatir resfríos, también sirve como desinflamante para heridas. Se hacen pomadas, mezclándola con miel de abeja, lo que llaman medicina tradicional”, comentó.
Sin embargo, Humacata indicó que los productores sólo tienen una utilidad que alcanza aproximadamente 30 por ciento, por falta de apoyo de las instituciones públicas, toda vez que el trabajo para lograr la cantidad de hectáreas cultivadas (70) requiere preparar el terreno con abono orgánico, efectuar almacigueras, trasplante, carteo y curar con químicos, proceso que implica una inversión de un 70 por ciento de los recursos del productor que generalmente lo hace de forma manual.
Por su parte, el exasambleísta departamental, Bartolomé López, indicó que luego de varias gestiones se concretó la construcción de la planta industrializadora de manzanilla en El Puente. Infraestructura que se ejecutó con recursos de un crédito de 100.000 dólares. “El objetivo es otorgar valor agregado a los alimentos y mejorar la producción, no solo de manzanilla, sino también de otros productos”, agregó.
Puntualizó que la fábrica cuenta con un molino, tostadora y una selladora, además los envases, todo elaborados con material adecuado para que se mantenga el producto conservado.
PRODUCCIÓN
Aunque el éxito del cultivo se debe a la fertilidad de los terrenos, Humacata explicó que el cultivo tiene un proceso, en marzo se realiza el almácigo, entre mayo y junio se realiza la siembra. La cosecha se extiende desde mediados de octubre hasta diciembre, tiempo en que la floración de la manzanilla alcanza su máximo esplendor.
Agregó que la cosecha se hace de diferentes formas y poco a poco se busca innovar con la tecnología, “para la cosecha se usa una especie de peine especial a mano sobre la planta, otros lo hacen con un carrito recolector de tracción humana o también con máquinas cosechadoras automotrices, que poseen barra cosechadora a dientes y corte tradicional”, explicó.
MERCADO
Según los productores el principal mercado para la manzanilla tarijeña que se comercializa en 11 bolivianos el kilo, es La Paz donde se encuentra la fábrica Windsor que elabora una variedad de mates para lo cual se destina la mayor cantidad de la producción y Santa Cruz donde se envía unas diez toneladas de manzanilla para la fabricación de té, champús y perfumes, producción que también es exportada al Brasil.
Según el dirigente, una de las ventajas de la manzanilla de Erquiz es que el 90 por ciento de la producción es orgánico, lo que permitió ampliar en los últimos años el mercado, convirtiendo a Tarija en líder de la producción nacional en el rubro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario