La promulgación de la Ley de la Coca puso nuevamente en el tapete de discusión el valor nutricional del arbusto. El Gobierno ha señalado que pretende industrializar al menos 6.000 toneladas de la futura producción del Chapare, en Cochabamba. Hay datos oficiales que señalan que unas 18.000 toneladas serían parte del consumo tradicional, según lo dijo hace un par de semanas el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, César Cocarico.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño, calcula que en Bolivia existirían más de 3.3 millones de consumidores tradicionales (acullicadores).
OPOSICIÓN POLÍTICA
El senador de UD Óscar Ortiz señaló el martes que la Constitución, en su artículo 384, protege la coca originaria y ancestral, como patrimonio cultural, es decir, como recurso natural renovable de la biodiversidad de Bolivia en su estado natural y no para el narcotráfico. Ortiz argumentó de esa manera el recurso de inconstitucionalidad que anunció presentará ante las instancias judiciales del país.
En días previos a la sanción legislativa de la ley, promulgada ayer por el presidente, Evo Morales, el defensor del Pueblo, David Tezanos Pinto, defendió el valor nutricional de la coca y alentó su consumo como alimento.
CONSUMO
Un grupo multinacional de científicos, liderado por la Dra. Mary Penny, directora del Instituto de Investigación Nutricional (IIN) del Perú, constató la escasa presencia de nutrientes en la coca, así como la composición de alcaloides –el más importante y dañino de ellos la cocaína– y de ‘antinutrientes’, por lo que sería motivo más que suficiente para no promover su consumo, mucho menos su utilización dentro estrategias que busquen mejorar los niveles de nutrición.
CALCIO
“La leche tiene cinco veces más o hasta diez veces más [de calcio] que lo que se recomienda como dosis en la hoja de coca” destacó la doctora Penny, no sin dejar de añadir que también otras sustancias, como la kiwicha o la quinua, son fuente importante de calcio, por lo que es mucho mejor recomendar el consumo de estas últimas, ya que “la hoja de coca no está contribuyendo con una importante cantidad de calcio de ninguna manera”.
HARINA DE COCA
Han sido varias las oportunidades en que defensores de la planta que utiliza el narcotráfico para la producción de drogas, han intentado promover el consumo de la hoja de coca en forma de ‘harina’ durante los últimos años, hecho que causó preocupación en el IIN del Perú y originó el interés de esta entidad por examinar su supuesto contenido nutricional.
ALIMENTO
Las pruebas realizadas en los laboratorios internacionales revelaron que el nivel de calcio en la hoja de coca es mínima, “hay menos calcio del que pensamos”, relató Penny en un artículo que publicó el portal Inforegión, el pasado fin de semana.
“Más aun, al comparar el contenido en calcio de la dosis máxima recomendada por los defensores de la ‘harina de coca’, dos cucharadas, con un vaso de leche, podemos observar que la hoja molida tendría la quinta parte del calcio que contiene la leche”, añadió.
ESTUDIO EXTERNOS
Según dijo Penny, se enviaron muestras del arbusto para su análisis al Instituto de Salud Pública, en Québec – Canadá, donde hicieron [el análisis] de los minerales y los alcaloides. “Enviamos al laboratorio de Inglaterra [Science Laboratory], donde analizaron los minerales; a un laboratorio de Francia [Aquanal Pessac], donde hicieron el análisis de las vitaminas; a la Universidad Tecnológica de Chalmers, en Gotenburgo, Suecia, donde hicieron el análisis de algunos de los factores que inhiben la absorción; y en el laboratorio CGS-Perú donde se hizo la evaluación de la cantidad macro de proteínas y carbohidratos”, explicó.
COCA PARA USO MÉDICO
La hoja de coca no tendría ningún beneficio para la salud, afirmó en 2013, el doctor Alfonso Zavaleta, especialista del Centro de Información y Educación para la Prevención del Abuso de Drogas del Perú (Cedro), en relación al proyecto –anunciado entonces– de industrialización de 75 mil toneladas de coca para productos medicinales en Bolivia.
“No existe evidencia concreta que sugieren o plantee en la medicina occidental moderna, basada en evidencias, que la hoja de coca o sus extractos pudieran ser de uso medicinal. No hay evidencia concreta de eso ni nada que lo soporte”, precisó Zavaleta al portal peruano.
Luego que el presidente boliviano, Evo Morales, señalara que está “totalmente demostrado” que el consumo de la hoja de coca ayuda a combatir la diabetes, el farmacólogo insistió que el consumo de la planta no es bueno para la salud. “La coca, al contrario, tiende a subir la glucosa de los pacientes…por ejemplo, la harina de hoja de coca, sus alcaloides tóxicos se meten al cuerpo y habrá problemas de salud que antes no había porque ni siquiera en la naturaleza se come la hoja de coca”, señaló el profesional en un reporte publicado ese año por el citado portal.
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