Se espera que el próximo año el Iniaf presente una variedad que hoy es investigada por científicos. El mejoramiento genético del trigo, el arroz, la caña de azúcar y otros productos también son estudiados. El Gobierno destina 52 millones de dólares para el plan quinquenal, con el que busca garantizar la seguridad alimentaria.
El maíz híbrido es otro de los productos que se estudia lograr a través del mejoramiento genético para elevar la producción del grano que, hoy por hoy, es escaso en el mercado nacional.
Aunque esta variedad de maíz recién podría ser incorporada el próximo año al mercado nacional, el Gobierno está seguro que con esta innovación podrá atenderse la demanda cada vez más creciente.
El viceministro de Desarrollo Rural, Víctor Hugo Vásquez, afirma que investigadores bolivianos avanzan a paso acelerado para lograr la producción de maíz híbrido, cuyo rendimiento podría fluctuar entre 3.5 y 4 toneladas por hectáreas.
La producción de maíz para este año es de 400 mil toneladas, frente a las más de 760 mil toneladas de demanda.
Diversos factores, entre ellos los fenómenos climáticos, provocaron una considerable disminución en la producción. Los productos apenas llegaron a cultivar 93 mil hectáreas de las más de 150 mil previstas.
Según la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas (Anapo), de no existir políticas concretas de parte del Gobierno para potenciar al sector e incentivar la producción, la situación podría agravarse.
Sin embargo, el viceministro Vásquez asegura que con el maíz híbrido, poco a poco se intentará cerrar la brecha que hoy existe entre la oferta y la demanda.
CAÑA Y TRIGO
Así como el maíz, los expertos en mejoramiento genético también buscan lograr nuevas variedades de caña de azúcar y trigo.
En ambos casos el objetivo es incrementar la producción y elevar su rendimiento, de manera que paulatinamente se alcance los niveles necesarios para atender la demanda del mercado.
Asimismo, las variedades que se investigan tanto para la caña como para el trigo buscan que sean resistentes a los fenómenos climatológicos, que sólo el 2010 afectó al 25 por ciento de la producción de la caña de azúcar.
La producción programada para el año pasado de caña de azúcar era de 12 millones de toneladas, sin embargo, por las sequías e inundaciones, apenas se logró producir 9 millones de toneladas.
En el caso del trigo, si bien la producción tuvo un notable incremento, ésta apenas abastece al 43 por ciento del consumo nacional. El restante es cubierto con la importación.
Al mejoramiento genético que se viene realizando con los productos mencionados también se suma el arroz, la quinua e incluso una variedad de frutas.
“Nuestro objetivo es garantizar la seguridad alimentaria. Con todo lo que estamos haciendo estamos seguros de lograrlo”, indica Vásquez.
CERO TRANSGÉNICOS
Según el Viceministro de Desarrollo Rural, el mejoramiento genético que se realiza es totalmente natural, toda vez que se utiliza semillas orgánicas y convencionales, “en ningún momento es transgénica”.
Agrega que el objetivo es que los bolivianos tengan suficientes productos genéticamente mejorados que sean beneficiosos para su salud.
“El Gobierno prioriza la mecanización, el cuidado de los campos productivos y el mejoramiento genético de las semillas”, explica al aclarar que lograr un producto mejorado no es “de la noche a la mañana; todo lleva su tiempo”.
En ese sentido, anuncia que las investigaciones que se realizan tendrán sus resultados, algunas este año, y otras, como el maíz híbrido, el próximo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario