Bolivia pierde competitividad con los cupos. José Luis Landívar, presidente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), resaltó que es primordial para los productores y el sector agroindustrial el contar con la libre exportación de los productos, toda vez que actualmente están cursando por un periodo de incertidumbre, debido a que no cuentan con la seguridad de comercialización de todos los excedentes a mercados internacionales.
"El Gobierno, con la imposición de los cupos de exportación para el sector agrícola, ha generado que el nivel de inversión por parte del productor se desacelere y el exportador pierda competitividad frente al comercio internacional, toda vez que no puede llegar a negociar mayores volúmenes con contratos a largo plazo, debido a que no tiene la certidumbre de cumplir con las grandes demandas de los compradores internacionales", indicó Landívar al momento de resaltar que es importante que a través de la Cumbre productiva, el Gobierno conceda la exportación plena y el país pueda llegar a comercializar más de $us 15.600 millones, incrementando el comercio de los productos no tradicionales que actualmente solo representan un 18% de lo exportado la gestión 2014.
Falta de seguridad jurídica frena mejoras. Demetrio Pérez, presidente de Asociación de Productores de Oleaginosa y Trigo (Anapo), señaló que la falta de seguridad jurídica ha frenado a los productores, toda vez que debido a la susceptibilidad que esto ha generado, no se han realizado mejoras en los campos de cultivo, perjudicando el incremento de la productividad y la expansión de la frontera agrícola.
Permisos de desmontes. La experta María Isabel Ortiz indicó que es necesario que el Gobierno mediante la ABT (Autoridad de Bosques y Tierra) acelere los permisos de desmontes para que se incremente la superficie cultivable y por ende los volúmenes a comercializar, brindando de esta manera seguridad alimentaria al país.
Mejoras
Biotecnología favorecería a los productores de grano y algodón
Salomé Tupa, presidente de la Federación de Federación Nacional de Cooperativas Arroceras (Fenca), destacó que el ingreso de la biotecnología al sector productor boliviano, favorecería enormemente a los productores de grano como el maíz, algodón, soya, sorgo y arroz, quienes contarían con mayores variedades resistentes a enfermedades e insectos.
"Al contar con semillas transgénicas el productor reduce su costo de producción, porque no tiene que fumigar cinco o siete veces su cultivo y tiene un incremento en rendimientos que mejora los volúmenes de producción", indicó.
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