Agropecuarios piden liberación plena de exportación, mejor precio a sus productos e incentivos

Una singular visita a las principales zonas de producción del oriente boliviano en el departamento de Santa Cruz nos puso en clara evidencia de que cientos de agricultores están desalentados a seguir produciendo soya, maíz, trigo, caña de azúcar y otros alimentos debido al panorama incierto de la producción, a pesar del crecimiento, por los bajos precios en el mercado interno, liberación plena de mercados de exportación y por la falta de incentivos para el sector agropecuario.

Una primera visita en la época de siembra de cultivos en la campaña de verano y otra durante la cosecha nos pudo deslumbrar la situación en de incertidumbre en la que se encuentran cientos de productores en vista de la importancia que reviste la producción en el agro y las cadenas productivas que está alrededor de esta actividad de desarrollo, porque muchos de los agricultores sembraron con optimismo pese a la adversidad y esperan respuesta a sus demandas de parte de las autoridades del sector.

“Los productores tenemos cupo para exportar y si hubiera transparencia en las exportaciones podríamos exportar a cualquier país del mundo, podríamos ser competitivos y tener mejores precios”, sostuvieron en un contacto con la prensa, organizado por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior IBCE, porque hacer agropecuaria genera mucha inversión. Ahora les preocupa el bajón de precios porque es de beneficio para otros países que ingresan sus productos con menor costo a Bolivia mediante el contrabando, la importación y la aplicación de la póliza de mínima cuantía que otorga cupos de importación a comerciantes en desmedro de la soberanía alimentaria.

Argumentaron que estos aspectos originaron la baja de los precios y a razón de ello se estima que se vaya a reducir personal que se dedica a esta tarea en el campo, porque así no tiene condiciones de pago. Se estima que más de 1 millón de productores se dedican a esta actividad en el cultivo de soya, maíz, trigo, sorgo, etc., sólo en Santa Cruz.

En el caso de la soya, aunque se cumplió con la meta de llegar a producir 1 millón de hectáreas sembradas logrando la cosecha de más de 2 millones de toneladas y cubrir la demanda interna; se tiene un excedente en la producción que se podría exportar si hubiera la liberación plena de exportaciones. Aunque la demanda de soya en el mercado externo es ilimitada, sólo se consume en país el 30% en la alimentación del ganado, de aves, la agroindustria y el resto de la producción es acopiado.

Si bien se cubre la demanda interna, ello amerita exportar el excedente de la producción ya sea en materia prima o con valor agregado, porque cada año se incrementa la producción y por ello hay esta urgencia para así darle valor agregado a la soya y sus derivados mediante la agroindustria con un precio justo para el productor.

Datos reales muestran que el pequeño productor soyero que produce entre 30 a 50 hectáreas está siendo mal pagado y por falta de mercado llegó a comercializar su producción incluso a menos Sus.200 la TM.

Si bien la soya no solo es soya porque es parte de la cadena productiva y de la rotación de otros cultivos como maíz, sorgo, trigo, girasol y chía en la campaña de invierno, este rubro se ve afectado en esta campaña con la sobre oferta del excedente de la producción, dejando a los agricultores esta oportunidad de obtener mayores ingresos y sostenibilidad.

TODO ESTÁ ESTANCADO

De acuerdo a la versión de Reynaldo Díaz. Presidente de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo Anapo hace falta mejorar la productividad con biotecnología como los países vecinos que triplican su producción en desventaja con nuestro país que este año tuvo una pérdida de 500 mil hectáreas en la zona de Pailón y Cuatro Cañadas en Santa Cruz y bajó en rendimiento se bajó de 2.4 TM a 2.1TM.

Hizo una comparación con el promedio del precio internacional de Sus.362 la TM en la Bolsa de Chicago, que debería pagar la industria, pero eso no sucede y así hay una brecha muy grande y es imposible ser competitivo y así se pierde como 90 mil millones de dólares.

Como no hay respuesta a estos cuestionamientos “nos estamos hundiendo”, resaltó, además la falta de mercados como Colombia nos están afectando y todo está estancado en estos últimos meses y el sector agropecuario ha sido olvidado y no llegan medidas para salir adelante.

AGOBIADOS POR LAS DEUDAS Y BAJO PRECIO

Susano Terceros, del Este de Santa Cruz, en la región de Cuatro Cañadas sostuvo que su zona fue golpeada por la sequía y no pudieron recuperar en la venta sus costos de producción y por ello se ven agobiados por las deudas y cobros que les hacen las casas comerciales, porque muchos productores han mermado sus ingresos económicos a comparación de otros años. Ellos piden que mediante el gobierno se reprogramen sus deudas y solicitan el uso de la biotecnología para aminorar costos de producción.

Rimber Crespo, de Anapo Norte, sostuvo que por lo menos deberían exportar 300 mil toneladas, de más de 2 millones de toneladas producidas para aliviar sus costos de inversión y porque el pequeño productor es el más golpeado “porque no es accesible a la banca” y el precio no cubre su producción.

Silvia Vale de la Filial Norte de Anapo, sostuvo que tuvieron reunión con el gobierno, mediante el Ministro Cesar Cocarico y les explicaron sus problemas pero no fueron escuchados porque ellos tienen una decaída en precios y el agricultor cruceño está en una situación delicada porque no tienen mercado y requieren biotecnología para reducir costos de producción, porque y si no encuentran respuesta van a dejar de producir.

BAJO PRECIO AFECTA A LA PRODUCCIÓN LECHERA

En la hacienda ganadera Madriles en donde la producción lechera oscila entre 17 litros por día, por vaca, los productores apuestan en continuar produciendo con 400 vacas que producen 7 mil litros por día y quieren llegar a 1 mil vacas, además producir ensilaje para el ganado con sorgo y maíz; la situación se ve afectada por el tipo de cambio de la moneda, porque es negativo para producción y positivo para importación y contrabando y ello hace que la comercialización y los precios se vean afectados y los productores “vean un horizonte negro” porque la situación es adversa y recuperar su inversión es difícil y por ello se está parando el crecimiento.

Estamos viviendo momentos difíciles.

Luego de presentar con éxito el emprendimiento de la empresa azucarera Aguaí ubicada en el norte de Santa Cruz, con 300 millones de inversión, ejecutivos de esta entidad que ven con optimismo la habilitación de esta nueva empresa a pesar de los momentos difíciles en que se vive, por cuanto lo importante es generar mayores empleos y por ello se debería tener la liberación plena de exportaciones de los excedentes.

CAMBIO CLIMÁTICO AFECTÓ EN OKINAWA

Isamo Kondo, nacido en Bolivia de origen japonés sostuvo que si bien los productores se esmeran en la producción de arroz en la cooperativa Caisy de Okinawa en Santa Cruz, ellos también se afectados por el contrabando, el cambio climático y por plagas, porque su producción de 50 mil toneladas de arroz bajó la producción, porque la meta era sembrar 10 hectáreas y este año sólo se alcanzó las 8.500 hectáreas.

Sin embargo ellos continúan con optimismo su labor llegando a producir 25 millones de unidades de huevos por año representa, lo cual representa un 20% de la producción nacional,

EL TRIGO NO CUBRE COSTO DE PRODUCCIÓN

En Okinawa 2, principal zona de productora de trigo a comparación de otros años bajó la producción y apenas se llegó a comercializar a Bs. 220TM la tonelada en las molineras y en Emapa a Bs.280TM, aunque el costo de producción fue 500 dólares por hectárea y por ello no se cubre la inversión, y para mejorar requieren un precio justo, investigación y crédito para mejorar la productividad.

Por todo lo antecedido el planteamiento de los productores es encontrar respuestas a sus demandas, ser más eficientes y producir más con menor costo, con uso de la biotecnología y la liberación de plena de exportaciones.